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Convertirse en una empresa innovadora no es tarea fácil, pero tampoco imposible. Las compañías emprendedoras organizan la mejora y la transforman en su ADN, o mejor dicho, en su cultura. La innovación en el mundo de los negocios es uno de los elementos diferenciadores y es un mecanismo valioso para ser más competitivo.
Hoy día, muchas organizaciones están pensadas para ser eficientes más que para innovar, pero estudios señalan que la gestión innovadora que pueda desarrollar un negocio le permitirá explorar nuevas oportunidades para lograr una rentabilidad con el transcurrir de los años.
¿Pero cómo se logra?
Lo primero que debe hacerse es disponer del personal adecuado y generar un entorno que fomente e incentive las conductas pertinentes para innovar de manera exitosa y sostenible.
Para crear dicho entorno se debe considerar la estrategia de innovación, que se encargará de marcar el rumbo de los constantes esfuerzos de innovación. Esta debe ir alineada con las metas del negocio, del emprendedor o del empresario.
Es conveniente tener en cuenta las áreas estratégicas: lugar (dónde seremos activos); vehículos (medios a utilizar para lograrlo); diferenciadores (con qué contamos para ser competitivos en el mercado); programación (qué tan rápido será nuestra velocidad en la ejecución de los proyectos) y lógica económica (formas de obtener los beneficios).
Luego de obtener esa información se debe formular una estrategia de innovación acorde y coherente con el negocio; partiendo de este punto, es importante plasmar las respuestas a las siguientes preguntas: ¿Por qué innovar?; ¿Qué espero de la innovación?; ¿Qué se entenderá dentro del negocio por innovación?; ¿En qué áreas deseo innovar?; ¿Cuánto deseo innovar?
Tenga en cuenta que cuando una empresa -por muy grande o pequeña que fuere- apuesta por la innovación, lo que está haciendo es haciendo cambios que generen resistencia. Las transformaciones, sobre todo en el área de los negocios, es fundamental para el crecimiento de la organización, para llegar a más público, complacer a los clientes existentes, posicionarse en el mercado y mantenerse en el futuro.
Estrategias para generar oportunidades de negocio
Penetrar en el mercado
Aumentar el grado de compromiso de la empresa en la clase de negocio que se venía dedicando es importante, sobre todo cuando el mercado atraviesa etapas de crecimiento o de madurez.
El emprendedor deber aumentar el consumo de clientes actuales a través de incentivos económicos o programas de fidelidad. Debe captar a los consumidores de la competencia (para ello se debe hacer una mayor inversión publicitaria), así como a un nuevo público (por medio de una bajada de precios o cambios en la imagen de marca).
Desarrollar productos
Impulsar la venta de nuevos productos ya existentes en el mercado, pero perfeccionándolos, de tal manera que se creen nuevas oportunidades de negocios. En esta fase se desarrollará nuevas características del producto a través de modificaciones o sustituciones, se generará diferencias de calidad y se lanzará nuevos modelos.
Desarrollar el mercado
Las empresas deberán penetrar los productos que ya producen en nuevos mercados para alcanzar una base de consumidores más amplia. Para ello se necesitará de nuevos canales de distribución, áreas geográficas adicionales, atraer nuevos grupos de consumidores y cambiar la política de posicionamiento, ya sea recurriendo a la venta directa o por Internet.
Diversificar
Esta estrategia es más arriesgada, se centra en desarrollar nuevos productos en mercados desconocidos por el empresario o emprendedor. Aquí, las nuevas oportunidades de negocio se dan introduciendo nuevos productos similares a los existentes para atraer distintos segmentos de mercado o cuando una empresa de distribución comercial dirige su negocio hacia actividades mayoristas y de fabricación.